
Entre otras muchas cosas, soy hija, hermana, compañera, amiga y mujer de camino. Lo que sé y comparto, es que lo que he logrado construir desde mis formaciones y comprensiones a partir de mi experiencia personal de sanación. Después de realizar mi formación profesional y de posgrado, me dediqué a acompañar procesos institucionales dirigidos a la atención de mujeres víctimas de violencias; sin embargo, sentía que algo faltaba, un camino diferente desde donde quería explorar un acompañamiento de sanación y trascendencia para mi misma y las demás mujeres, un proceso profundo de sanación que transformara sus vidas.
El universo fue abriendo sus puertas para conocer y trabajar desde diversas terapias holísticas, en las que además me fuí formando; una de ellas las Constelaciones Familiares. Al mismo tiempo a mis 35 años y gracias a una crisis profunda que fue mi mayor bendición encontré un guía y una Escuela, que me ha ayudado a construir un camino espiritual permitiéndome vivir un maravilloso y consciente viaje hacia mi interior.
Una reconciliación con mis heridas más profundas de la infancia y mi linaje, brindándome la oportunidad de redimensionar mi visión de la vida y conectar con el propósito de compartir y acompañar procesos de vida desde la esfera espiritual con personas que como yo estén dispuestas a vivir ese viaje profundo hacia su interior.
Hoy soy más consciente, plena y feliz, entregada al servicio desde el amor y el compromiso, ya que ese camino terminó de unir las piezas faltantes en el rompecabezas de mi proceso de vida, sin este camino mi formación profesional no hubiese tenido el mismo peso para lograr el impacto trascendental que quería lograr en las vidas de las personas. Hoy desde mi propia experimentación mi mayor enfoque está en acompañar el camino de sanación con nuestro origen, con papá y mamá, en conexión con nuestra Naturaleza Divina, la abundancia, el bienestar y la felicidad como única condición inherente de nuestro Ser. Sigo caminando, sigo en construcción constante guiada por el gran espíritu y dedicada al servicio desde el amor, el compromiso y la responsabilidad que implica acompañar a otr@s en la sanación y transformación de su Ser. Para recordarnos, reencontrarnos y reconciliarnos con la Divinidad que habita en cada un@ de nosotros.